Murder on The Orient Express - Patrick Doyle

Un lujoso tren, un asesinato, 13 sospechosos y un famoso detective, quien tendrá que descubrir al culpable. En 1974 el reconocido director Sidney Lumet llevó al cine su adaptación de la exitosa novela "Asesinato en el Expreso de Oriente", la décima aventura del sagaz detective Hércules Poirot.

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Anthony Perkins, Ingrid Bergman, Lauren Bacall, Sean Connery, Jacqueline Bisset y Albert Finney fueron parte del icónico reparto de este clásico que se inmortalizó entre los cinéfilos y que recibió 1 galardón y 5 nominaciones a los premios Óscar, entre ellas  música original compuesta por el británico Richard Rodney Bennet. Imposible olvidar la maravillosa suit que nos introduce en la aventura, o ese poderoso vals que anuncia que el expreso ha comenzado su viaje.

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Este año el director, productor y actor Kenneth Branagh, quien usualmente sorprende con sus grandes adaptaciones de los clásicos (de escritores como Shakespeare o Mary Shelley), trae su versión de este popular relato de la reina del Misterio, Agatha Christie.

Como es usual en sus películas, Branagh hace parte del reparto interpretando al celebre detective; lo acompañan grandes actores de nuestro tiempo como Willem Dafoe, Judi Dench, Michelle Pfeiffer, Penélope Cruz, Johnny Depp y la naciente estrella Daisy Ridley, no deja de ser emocionante ver como estas grandes figuras van desfilando por la pantalla encarnando cada personaje. Sus interpretaciones, la impactante producción y el hermoso diseño artístico, fueron la fuente de inspiración para la música, como lo afirma el compositor escocés  Patrick Doyle.

 

Doyle quien ha trabajado con el director por casi 30 años desde su exitosa ópera prima "Henry V", nos lanza a la aventura con un dinámico "The Wailing Wall", un tema que con sonidos étnicos nos ubica en la Jerusalem de los años 30, entre el muro de los lamentos y su bazar presentándonos al excéntrico y hábil detective.
 

Sin embargo, los minutos transcurren y el compositor nos va mostrando que ha decidido tomar un camino muy diferente al establecido por Richard Rodney Bennet en 1974, Doyle se centra especialmente en el pasado y dolor de sus personaje dejando de lado cualquier indicio de aventura o misterio, lo que por momentos nos podría hacer sentir que en cuanto a lo musical se va perdiendo fuerza; no obstante debo admitir que la belleza y el lirismo de la partitura me permite ser un poco condescendiente con Doyle.

 

Con los créditos finales volvemos a escuchar en el cine la voz de Michelle Pfeiffer en "Never Forget", con  letra del mismo Kenneth Branagh, Doyle nos cuenta que aunque la canción surgió un poco tarde durante el proceso creativo, representa el tema y el corazón de la película.

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