Allied (Aliados) – Alan Silvestri

 

 

En mi vida he escuchado muchos trabajos del Maestro Alan Silvestri. No niego que los temas de “Back To The Future” y “Predator” son de mis favoritos como amante de este género; tampoco oculto mi disgusto de 1.995 cuando no ganó el Oscar con “Forrest Gump”, pues en mi corto entender, él merecía ganarle a “The Lion King” de Hans Zimmer; y últimamente su influencia llegó a mi vida por un ángulo encantador, pues mi hijo de casi tres años, reconoció su inimitable estilo, hecho que comprendí cuando él inconscientemente asoció la música de “Stuart Little” con la de “Captain America”. Quizás por estos hechos, claramente subjetivos, no entiendo las críticas a su última obra en la cinta del director Robert Zemeckis, “Allied”.

 

Reconozco que la Banda Sonora está lejos de sus mejores obras, pero también sé que es un trabajo válido y resaltable. Aquí hablamos de una cinta en la que el director y su guionista (Steven Knight) dan trascendencia a los sentimientos de los protagonistas (Brad Pitt y Marion Cotillard), envueltos en el drama de la segunda guerra mundial. Ellos, además de ser combatientes, viven en una mentira, uno conscientemente y el otro en proceso de descubrirlo. Esta ambivalencia de emociones, la manera de enfrentarlas cada uno a su manera y las presiones que soportan, da lugar a que el estilo de la partitura no sea regular y vaya de las tradicionales y vertiginosas piezas con instrumentos de viento y percusiones, a las lentas con el piano y otras cuerdas.

 

En varios segmentos del film la música es gran ausente, pero entiendo que el silencio obedece a la falta de claridad en la vida de los espías. Eso sí, en la secuencia final, en la lectura de una carta en tiempos futuros, la música es esencial, y da un respiro a los espectadores, como cuando el personaje de Tom Hanks deja la isla en “Cast Away”.

 

Resumiendo, no todas las películas necesitan una larga Banda Sonora, que soporte el peso del guión o que lo nutra; por el contrario, la música puede acompañar, llenar espacios, insinuar emociones crecientes o ayudar a dar cierres. Seguramente esta partitura no será nominada a premio alguno, pero en lo que a mi concierne, cumple con su misión.

 

Leonardo Sotelo – 19/I/2017